El presidente electo, Horacio Cartes, nombró al colombiano Juan Manuel Santos, como una referencia ideologica en el continente. Confirma así el alejamiento de Paraguay del eje de países cercanos al chavismo, al que se había sumado con Lugo.
En conferencia de prensa con los periodistas extranjeros acreditados para las elecciones, el flamante Presidente de Paraguay, Horacio Cartes dio señales prudentes, pero señales al fin, de que orientación y que medidas tomara su gobierno a partir de su asunción formal el 15 de agosto próximo.
La primer consulta inevitablemente fue sobre el Mercosur, organización en la cual Paraguay esta suspendido desde la destitución legal mas no legítima de Fernando Lugo. Cartes reitero "su mejor predisposición para que Paraguay se reincopore al Mercosur y a Unasur", descartando cualquier brote de orgullo nacionalista paraguayo que dificulte el transito de regreso al ente del cual es socio fundador.
El principal escollo para esa vuelta es que el Senado paraguayo nunca aprobó la incorporación de la Venezuela bolivariana, que se hizo justamente con la ausencia de Paraguay. En ese punto particular Cartes fue mas elíptico, dijo que "todo lo que sea positivo para Paraguay, dentro del estado de derecho, seguramente será avalado por los senadores". Y ante la repregunta agregó: "Los senadores no se van a oponer a nada que signifique mejoras para el país".
En esa línea Cartes confirmo que ya hablo con la presidenta brasileña Dilma Rouseff, el uruguayo Jose "Pepe" Mujica (que lo invito a la cumbre del Mercosur en junio, donde dijo que no ira porque no habrá asumido para esa fecha) y con Cristina Kirchner que, dijo, fue la primera en saludarlo oficialmente anoche. Con Nicolas Maduro, el presidente venezolano que aquí fue acusado de incitar al ejercito a rebelarse contra la destitución de Lugo cuando era Canciller, dio a entender que había conversado extraoficialmente.
Realineamientos
Cartes no negó que podría buscar acuerdos comerciales por fuera del Mercosur con EE.UU y los países del Pacífico y en una clara alineación política nombró al conservador presidente colombiano Juan Manuel Santos y un "consejo" de responsabilidad fiscal que este le dio, cuando lo interrogaron sobre su ubicación ideológica.
En la misma línea señaló que a su entender el papel del Estado es generar condiciones para el desarrollo del sector privado. Toda una definición para el empresario que llegó a la política haciendo - simil Mauricio Macri - una escala en el futbol, en el club Libertad.
Inevitablemente, la prensa extranjera, con mas "permisos" que la local hizo alusión a dos temas álgidos de la campaña. Los antecedentes de Cartes como presunto contrabandista y narcotraficante y la matanza de Curuguaty (enfrentamiento entre policías y campesinos sin tierra que costo la vida de varios de los últimos y a la postre, el cargo al presidente Lugo).
Cartes confirmó que estuvo preso por un delito financiero "unos sesenta días creo", pero se excuso en que el Código Penal paraguayo de ese momento "hacia que primero te metan preso y después te defiendas". Sobre el resto de las acusaciones, dijo que había sido sobreseído en tres instancias judiciales.
Finalmente negó vinculación alguna con Curuguaty y apunto a las responsabilidades de "la alianza de gobierno" que, dijo, "mas allas de sus peleas es la misma que gobierna ahora".
"La gobernadora Cristina Villalba adivirtió que la Policía no debía entrar porque los campesinos estaban armados y la desoyeron, preguntenle a ella que ahora es diputada electa", cerro Cartes.
La primer consulta inevitablemente fue sobre el Mercosur, organización en la cual Paraguay esta suspendido desde la destitución legal mas no legítima de Fernando Lugo. Cartes reitero "su mejor predisposición para que Paraguay se reincopore al Mercosur y a Unasur", descartando cualquier brote de orgullo nacionalista paraguayo que dificulte el transito de regreso al ente del cual es socio fundador.
El principal escollo para esa vuelta es que el Senado paraguayo nunca aprobó la incorporación de la Venezuela bolivariana, que se hizo justamente con la ausencia de Paraguay. En ese punto particular Cartes fue mas elíptico, dijo que "todo lo que sea positivo para Paraguay, dentro del estado de derecho, seguramente será avalado por los senadores". Y ante la repregunta agregó: "Los senadores no se van a oponer a nada que signifique mejoras para el país".
En esa línea Cartes confirmo que ya hablo con la presidenta brasileña Dilma Rouseff, el uruguayo Jose "Pepe" Mujica (que lo invito a la cumbre del Mercosur en junio, donde dijo que no ira porque no habrá asumido para esa fecha) y con Cristina Kirchner que, dijo, fue la primera en saludarlo oficialmente anoche. Con Nicolas Maduro, el presidente venezolano que aquí fue acusado de incitar al ejercito a rebelarse contra la destitución de Lugo cuando era Canciller, dio a entender que había conversado extraoficialmente.
Realineamientos
Cartes no negó que podría buscar acuerdos comerciales por fuera del Mercosur con EE.UU y los países del Pacífico y en una clara alineación política nombró al conservador presidente colombiano Juan Manuel Santos y un "consejo" de responsabilidad fiscal que este le dio, cuando lo interrogaron sobre su ubicación ideológica.
En la misma línea señaló que a su entender el papel del Estado es generar condiciones para el desarrollo del sector privado. Toda una definición para el empresario que llegó a la política haciendo - simil Mauricio Macri - una escala en el futbol, en el club Libertad.
Inevitablemente, la prensa extranjera, con mas "permisos" que la local hizo alusión a dos temas álgidos de la campaña. Los antecedentes de Cartes como presunto contrabandista y narcotraficante y la matanza de Curuguaty (enfrentamiento entre policías y campesinos sin tierra que costo la vida de varios de los últimos y a la postre, el cargo al presidente Lugo).
Cartes confirmó que estuvo preso por un delito financiero "unos sesenta días creo", pero se excuso en que el Código Penal paraguayo de ese momento "hacia que primero te metan preso y después te defiendas". Sobre el resto de las acusaciones, dijo que había sido sobreseído en tres instancias judiciales.
Finalmente negó vinculación alguna con Curuguaty y apunto a las responsabilidades de "la alianza de gobierno" que, dijo, "mas allas de sus peleas es la misma que gobierna ahora".
"La gobernadora Cristina Villalba adivirtió que la Policía no debía entrar porque los campesinos estaban armados y la desoyeron, preguntenle a ella que ahora es diputada electa", cerro Cartes.
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